Es una de aquellas mujeres que cuando habla no puedes evitar escucharla y luego de eso, correr a buscar sus libros. Creadora del método HERA y también directora de la academia AMOR, Anamar Orihuela es una mujer mexicana que nos ha deleitado con libros tan espectaculares como el longseller “Hambre de Hombre” o “Doña Huevotes” entre otros.
Con 25 años de experiencia en la práctica de sanación de heridas de la infancia, dictando grupos de crecimiento, talleres, terapias y conferencias, Anamar nos abre una puerta y nos entrega herramientas para resolver todos aquellos nudos del pasado.
Con más de medio millón de libros vendidos, es además especialista de programas de radio, TV y Podcasts referente a temas relacionados con las heridas de la infancia .
En el marco del maravilloso libro Doña Huevotes – un libro que nos ha dejado gratamente sorprendidas-, MUKÍ Magazine ha querido invitar a Anamar a responder 8 preguntas acerca de temas tan importantes como validar nuestros enojos y la importancia de ponernos límites. Después de terminar de leerlo quisimos profundizar mucho más.
Esperamos que disfrutes de esta maravillosa entrevista.
1.MM:La primera pregunta que te quiero hacer tiene que ver con cómo tu infancia te condicionó para convertirte en la mujer que eres hoy ¿Por qué crees que las personas no nos escuchamos realmente y olvidamos el ser más amables y amorosas con nosotras mismas?
AO:Porque mirarnos es un camino fundamental para amarnos y nadie puede amar lo que no conoce, entonces creo que aprender a mirarnos, a observar lo que sientes, lo que piensas, lo que eliges, a conectarte con tu cuerpo, es el camino para poder ser más amable y amorosa porque te empiezas a conocer.
2.MM:En un mundo en donde el “patriarcado” ha sido la regla a través de los siglos, y en donde vemos que aún hoy en día se les exige a las mujeres mostrarse físicamente aceptables por parte de la sociedad ¿Cuál es el consejo que le darías a las mujeres más jóvenes para trabajar su estructura mental y emocional para no sucumbir a esta “manipulación”?
AO:Somos manipulables cuando no tenemos conciencia de nosotros mismos.Necesitamos construir una identidad de quiénes somos, cuáles son nuestros valores, qué es lo que nos gusta, nos importa en la vida y tomar todas las herramientas que te ayuden a mirarte, a conocerte, hacer un ejercicio donde tú puedas elegir los valores que rigen tu vida y que entiendas que eso es lo más importante que tienes. ¿Cuáles son los valores que rigen tu vida? El amor, la compasión, la ternura, el respeto, la confianza, y que realmente puedas basarte en esos valores y eso hace sólida tu propia identidad.
3.MM:A raíz de esto y debido también a la fuerte influencia de las redes sociales (hoy en día las niñas se están iniciando en el skincare a los 12 años) ¿Qué consejos le darías a los padres para que guíen a sus hijas/hijos y no terminen tan influenciados por “influencers”?
AO:Pues ser un modelo, un modelo de papás que tengan un proyecto personal, una vida propia, que se cuiden, que se quieran. El modelo es la mejor forma de educar, porque si tú se los dices, pero estás criticándote porque tú ves en internet mujeres que están súper delgadas y tú siempre estás peleada con tu gordura, o si tú realmente nunca estás conforme contigo misma, el consejo es que sean un modelo realmente y un ejemplo inspirador para sus hijos, más que alguien que les diga lo que tienen que hacer.
“Somos manipulables cuando no tenemos conciencia de nosotros mismos”.
4.MM:En tu libro dices que la Doña Huevotes es aquella mujer más masculina, cuya mirada es hacia fuera y que siempre termina resolviéndole las cosas y la vida a los demás ¿Cuál crees que es el rol que juega la crianza en este aspecto?
AO: Una persona, Doña Huevotes, puede sobreproteger a un hijo a través de su postura resolutiva porque no tiene tiempo para esperar que él aprenda y que él crezca. Esto es un acto de abuso, porque de alguna manera no le permite desarrollar sus propias capacidades y esto lo va a hacer dependiente a ella siempre. Entonces, es fundamental tener la paciencia de guiar a un hijo, de darle el espacio de ser él mismo o ella misma y que no termines tú resolviendo.
5.MM:En una parte de tu libro hablas de sanar a tus padres y haces un llamado muy potente a lograr ese cometido ¿Porqué crees que es tan importante hacerlo con una mirada más compasiva, pero sin olvidar validar esos enojos?
AO: Todos podemos tener enojo con los papás, todos podemos tener tristeza, podemos tener cosas inconclusas, pero realmente es importante aprender a validarlo como parte de un derecho que tienes, como algo que sientes y que puedes aceptar que vive en ti y qué hacer con eso. Eso es a lo que llamo yo la mirada compasiva. ¿Qué voy a hacer con este enojo? ¿Qué voy a hacer con esto? Porque hoy se trata de mí, ya no se trata de ellos. Sanarlos se trata de mí, se trata de estar limpio, se trata de fluir, se trata de no tener esos nudos en mi vida y desde esa mirada compasiva y aceptante es que yo necesito soltar, ver de frente y validar todo lo que siento, ojo, porque no es soltar y perdonar, es ver de frente, es ser consciente de lo que yo traigo con ellos, aceptarlo como parte de mi y poder soltar.
“Sobreproteger a un hijo a través de una postura resolutiva porque no se tiene tiempo para esperar que él aprenda y crezca es un acto de abuso”.
6.MM:En uno de los capítulos nos hablas de algo tan valioso como son los límites y comienzas con una frase tan potente como es “Si no hay límites, no hay protección”. Entendiendo que en la vida hay 8 áreas en las que tenemos que poner atención (para trabajar los límites en cada una de ellas) y de acuerdo a tu experiencia en el trabajo terapéutico con personas ¿En qué áreas crees que les cuesta más a las personas poner límites sanos?
AO:Yo creo que en el área personal, en la relación con nuestro cuerpo, comer bien, hacer ejercicio, respetar nuestros límites. Y yo creo que en la pareja, porque también hay mucha vulnerabilidad, se ponen muy a juego las heridas y nos desprotegemos también. Sí, creo que esas dos.
7.MM:En uno de tus capítulos hablas del Mito de la Caverna de Platón y para quienes somos amantes de la filosofía creo que es la perfecta referencia a cómo se comporta la masa hoy en día, siguiendo tendencias, buscando validación a través de las cosas materiales y no a través de la experiencia ¿Crees tú que la filosofía es uno de los caminos sanos para “sanear” nuestra estructura mental?
AO:Sí, me parece que la filosofía es una forma de vida, hay que aprender a cuestionarnos, aprender a leer cómo pensaban los grandes, Platón, Sócrates, Confucio, cómo pensaban estos filósofos. Sí, cuestionarnos es muy importante, también observarnos, filosofar, investigar, ser curiosos, es fundamental y esto es lo que nos enseña la filosofía.
“En las relaciones de pareja hay mucha vulnerabilidad, porque se ponen muy a juego las heridas y en ese aspecto nos desprotegemos”.
8.MM:Finalmente, y no puedo dejar pasar esta pregunta, aunque muchas se me quedaron en el tintero (me encantaría poder hablar más de tu obra en otro artículo) y es la siguiente: Si tuvieses que recomendar un primer y MUY IMPORTANTE paso para dejar de ser Doña Huevotes y convertirte en toda una mujer Ovario, ¿cuál sería?
AO: Pues yo creo que trabajar con tu miedo y aprender a ponerte límites a ti misma, porque si no siempre vas a sentir que tienes que defenderte, cuando tú sabes que te puedes defender con límites sanos, te conviertes en una mejor protectora de tu vulnerabilidad y ya no tienes que tener esta posición tan defensiva de la Doña Huevotes.Aprende a ponerte límites, a no hacer cosas que no quieres, a permitir ser una protectora de tu vulnerabilidad consciente, sin defensas y entonces vas a poder hacerlo.